14.6.09

Melón, sandía, será la vieja del otro día!

Me encanta la sandía.

Me encantan los perros..


He hecho un poema para ambos, en una clase de poesía, porque ni de pedo crean que es mi iniciativa hacer estas cosas


saludos :D


Un perro.

Un perro figura de estopilla aceitada
acostado a la fuerza sobre la yerba lánguida…
Su pulso color grana se precipita,
como un puño incendiando a la carne trémula,
como la carne trémula hambreando a la mocedad
como la mocedad agonizando en una bella
como una bella punzando una cabeza
como una cabeza empujando una pared
como una pared cercando al inocente
como el inocente desafiando a su dios
como un dios ahogando a su creación
como una creación pariendo un monstruo
como un monstruo presagiando una desdicha
como una desdicha comiendo los oídos
como unos oídos sangrando mentiras
como una mentira hablando por los labios del mudo
como los labios del mudo evitando un accidente
como un accidente culpando a un cándido neumático
como un cándido neumático triturando una sandía
como una sandía habitando en un perro
un perro figura de estopilla aceitada.

6.6.09

‡ Doctor psiquiatra ‡

Me choca la gente que dice estar loca sin siquiera conocer la frustración de serlo realmente. Nadie que sufra de demencia lo disfrutará a cada momento. Mentira... Excepto Gibrán, que tiene una especie de locura muy ballenezca, tan pacífica, llena de sentido común y sátira.

Estar loco es como rasgar un pizarrón con las uñas o rechinar los dientes con una tela de poliéster entre ellos. ¿Han intentado morder el poliéster? Esa molestia, además de joderte los dientes te penetra las orejas y la cabezota, que zumba a cada instante comentarios desastrosos.

A veces se puede estar feliz, y al siguiente día, sin razón aparente, uno se encuentra molesto, estresado, enojado. Algunas religiones manifiestan que los opuestos, la dicotomía, siempre son un equilibro, pero mentira, sólo Hermann Hesse conocía las dolencias de las bifurcaciones: el eterno choque del pensamiento y de las actitudes. La razón y el espíritu, el placer y el deber, lo bueno y lo malo, el amor y el desamor, el dolor y la felicidad, el sí y el no, el quiero y el no puedo, el jaja y el snif, el bla y el ...

En un arranque de creatividad, resulta hilarante -y a la vez molesto- comenzar un proyecto para nunca terminarlo.

Mentira que los locos siempre vistan de negro. Los colores de tu vestimenta no son más que el reflejo de lo que no puedes disfrutar.

Un loco debe estar siempre ocupado, siempre haciendo algo, lejos de lápiz, pluma, papel y computadora, porque luego se piensan en infinidad de situaciones ficticias: persecuciones, mal de ojo, infidelidades, rumores... todos ellos ficticios pero que gracias a la fuerza de tu mente, los finales más increíbles terminan convirtiéndose en los reales, dándote la imposibilidad de ser plenamente feliz.

Luego está el miedo a la soledad, y por otro lado el deseo de estarlo la mayoría de las veces.

Jamás olvidar el daño que te han hecho.

Almacenar en tu memoria los recuerdos exactos de aspectos inútiles porque llegas a creer que las cosas más triviales se vuelven fundamentales bajo ciertas circunstancias... Y que ahí es donde puedes descubrir la verdadera esencia de las personas porque es el único lugar en el que no fingen. Imaginar situaciones tan rebuscadas y de pronto encontrarte hablando en voz alta porque te olvidas de que la realidad esta aquí, no en tu imaginación. Luego no saber si algo realmente ocurrió o lo soñaste...

Planear todo esperando que nada se salga de tu control pero no poder tranquilizarte cuando una idea molesta se mete en tu cabeza.

♪ ♫ ♫
Pero no... Yo soy Julieta, y en luna llena, me vuelvo loba, y busco a Romeo, no estoy loca, no estoy loca, no estoy loca... sólo estoy, desesperada.

Dr. psiquiatra, ya no me diga tonterías, Dr. psiquiatra, quiero vivir mi propia vida, Dr. psiquiatra, yo no le pagare la cuenta, Dr. psiquiatra, ya no me mi, ya no me mi, ya no mires más las piernas, No, no, no, no, no, no, no. ♪ ♫ ♫