1.4.12

Febrero loco y marzo otro poco

Estas últimas semanas he estado aplicando la de Gloria Trevi, esa de que la vida da muchas vueltas, la de Café Tacuba que en esta pista de la vida unas veces estás abajo y otras arriba... Y pues como hace mucho no escribía mis pollito-aventuras, nada más puras cursilerías o cortatelasvenerías, pues les voy a platicar lo que hice todo este mes que me trae tan asombrada y a la vez contenta, pese a todo :P


Un día estás en Chihuahua, soportando el frío y al otro estás en Mérida, soportando la calor. En pasados días envié una ponencia a un congreso de literatura, era sobre las cosas que más me gustan en esta vida: Luis Spota, Manuel Puig y los perros... Okei, perros no, pero sí de esos dos escritores que nadie quiere... Total, envié mi ensayo sobre ambos autores, bastante ambicioso desde mi punto de vista y pues qué creen... ¡pues me la aceptaron! y de paso me invitaron a platicar sobre ella en Mérida, Yucatán. Aprovechando, me fui de viaje y de paseo por una buena parte de la península de nuestro bonito país. Otro rollo. Conocí personas interesantes (en un oxxo, qué pedo) y visité a un amigo que trabaja en una plataforma petrolera y allá encontró al amor de su vida. Tuve oportunidad de visitar algunas ruinas mayas, hablar con algunas personas de ese grupo indígena y, por supuesto, estar un poco más cerca de las playas caribeñas. Lástima que la playa a la que fui no era parte todavía del caribe, pero ya se veía algo de ese color verde tan característico en sus aguas. O como diría el mamón de Cortázar, el color maradriático... (uff, qué wey tan mamón)

Total, una imagen dice más que mil palabras... ¿Ahora se imaginan mil imágenes? Una semana duré allá, perdí mi computadora, pisteé cantidades exageradas de licor, conocí los hostales, hablé miles de pendejadas y, por supuesto, les di rienda suelta a mis patitas que para qué las quiero. Me paseé en camión, en pecera, a pie, en taxis (que los pinchis taxistas nunca saben cómo llegar) y comí de todo, hasta unos tacos árabes bien sabrosos... Allá no pasa nada, no hay más que dos noticias en la sección policíaca, había una tranquilidad que sólo habitantes norteños somos capaces de apreciar plenamente... No pude tomar tantas fotos como hubiera querido, pero es que así siempre me pasa, cuanto más disfruto, menos imágenes tengo oportunidad de captar... En fin, se agregan dos estados más a mi lista de lugares conocidos en la república mexicana (Mérida, Campeche) y neta, entre más viajo, más ganas me dan de seguirlo haciendo. Entre más conozco este país, más ganas me dan de quedarme en él. No creo que exista un lugar mejor. Y más allá de sentirme relegada o diferente ante tanta pluralidad, más identificada me siento. No sé, es otro pedo...







Un día le das consejos a un amigo sobre el desarrollo de los bebés, al siguiente te dice que asistas al funeral de su hijo. Una de las cosas más fuertes y tristes que me pasaron este mes, fue la lamentable noticia de uno de mis grandes amigos. Un día estábamos comiendo hamburguesas, hablando acerca del futuro de su niño, de los planes que tenía para él, las metas, los sueños, los deseos... Y de pronto por un giro del destino o qué sé yo, todo eso se acaba. Nada tenemos seguro. Lo que realmente me impresiona más, es su capacidad para poder seguir adelante... Ha pasado a tomar un lugar muy especial en la lista de personas que admiro y respeto...


Un día ves con indiferencia la nota de un ejecutado, al otro te toca presenciar una balacera. Tiempo después, decides invitar a un amigo a tomar una cerveza tranquilamente. Y bajo ese supuesto, te vas a un lugar tranquilo. De pronto ves que entra un sujeto sospechoso, hace unas preguntas intrascendentes al encargado (precio de la cerveza y si no ha visto a una mujer chaparrita por ahí) y se retira. Sientes la malavibra de esa persona, te quedas con el pendiente. Cinco minutos más tarde entra un sujeto a balacear el lugar y lo único que aciertas a hacer es tirarte al piso, cerrar los ojos y esperar que mientras da vueltas por el bar, no intente dispararte a ti, porque el dolor de una bala atravesando la carne debe ser muy particular, se debe sentir caliente y sofocante. Te debes sentir el mismo Jesucristo crucificado por las vísceras, el pecho o la cabeza, depende dónde recibas el impacto... Pero dios no te habla, no te dice que has muerto para salvar a la humanidad, sino por una lucha que ni siquiera es tuya, y por drogas que tú no consumes... Y en esas estás mientras esperas en el silencio más largo de tu existencia... Y cuando termina todo el asunto, te retiras de ahí porque no puedes declarar, y mientras avanzas te dices: "bueno, al menos no nos mató... algún día me tenía que tocar..." Porque al fin y al cabo esto ya es cosa de todos los días en mi ciudad...


Un día pierdes tu nueva credencial de elector, al otro recuperas la extraviada hace 5 años. Una persona montada en una imponente motocicleta, con un casco portando símbolos nazis, llegó a mi casa para regresarme una extraviada credencial de elector, hace casi 5 años. Fue la primera que saqué, con la que voté en las elecciones presidenciales y que sólo duró 6 meses en mi poder. Me pregunto qué lugares habrá recorrido y en cuántas manos habrá estado. Qué usos le habrán dado y por qué demonios regresó... Una locura...


Un día estás haciendo corajes por el amor y sus demonios, al otro haces una revisión de estos últimos años, y te sientes satisfecha. Ya sé que cómo hablo de Jesucristo, que hasta parezco religiosa o creyente, pero es que es un personaje muy chingón, y el ejemplo legendario de que la vida transcurre en espirales, que un domingo de ramos entras con toda tu gente a Jerusalén y tres años más tarde te están crucificando... Y pasan cinco días y revives... Que un momento estás bien y al otro vas a estar mal, y al otro vas a estar bien chingón y que todo pasa. Que si en una época eras feliz, no sirve de nada añorarla, sino continuar avanzando pues al fin y al cabo volverá a ser agradable, y la esencia de quien eres y lo que eres prevalece a través de los años. Son cosas que no se pueden cambiar. Hace 5 años era muy feliz, exageradamente feliz, tenía apenas 19 años y escuchaba The Killers. Pasaron muchas circunstancias que igual me trajeron altibajos, relaciones amorosas, complicaciones estudiantiles, viajes, experiencias y demás... Y dejé de escucharlos, hasta hoy. Y me siento como hace 5 años... A todo dar... Y no sé si sea el efecto de la primavera, de estos aires que me ponen a alucinar o qué sé yo. Pero quiero disfrutarlos el tiempo que duren, el tiempo que sea necesario, sin mirar triste hacia el pasado ni anhelante hacia el futuro, pues al fin y al cabo debemos disfrutar del presente, de que estamos chavos y se nos hace fácil, que el sol jamás volverá a ser como hoy y demás frases de superación personal (puaj!), y que deberían desconectar a Gustavo Cerati porque ya no volverá, y si vuelve probablemente será en forma de discapacidad intelectual, y por que él mismo dijo que "poder decir adiós, es crecer"... Aunque bueno, quién sabe, también existe la posibilidad de que cuando andas en bicicleta en esta pista de la vida, unas veces pasas abajo y otras arriba, una vuelta hacia la izquierda otras a la derecha... Hoy sin una dirección, mañana nadie sabe, sin responsabilidad, sin sentirte culpable... Otro día, otra mañana y otro tu camino, y que el viento en tu cara marque tu destino. Una vez que aprendiste nunca se te olvida porque así son las cosas en la pista de la vida :)

3 comentarios:

Jorge Nores dijo...

Esa rola de los tacubos es genial, me gusta un resto.

Que chidas tus polloaventuras, aun las de las balaceras. La bronca es esa de acostumbrarnos al mal. Ni pedo.

Un abrazo.

Pollini dijo...

aaw Jorge, qué gusto leerte, no sabía que visitabas estos lugares :P un abrazo a ti también

Gatiio dijo...

Uff, pollo. Andabas perdidisima, que bueno que te diste un rol por el sur. Alguna vez me paso esa del tipo en el bar dando de balazos y si se siente bien gacho. Un minuto estas bailando agusto y al siguiente estas con el culo en las manos y tu cita entre lagrimas en los brazos.

En cuanto a gente que pierde hijos o padres, nunca les entiendo.

por otro lado, las aventuras de chuy me entretenian mucho en la uni y luego sus seguidores me las hecharon a perder. Con eso de que se creen que ellos las cuentan mejor y su version siempre tiene updates mas chidos que la tuya, bueno segun ellos.

que bonito leerte de nuevo. ui mis yu.