30.3.14

Chihuahuitas, el De Efe los espera.

Me cae gorda la gente que se la pasa quejándose, tal vez por eso, a veces no puedo ni conmigo misma. Soy de las personas que, internamente, se la pasa quejándose de todo. El problema, tal vez, es que no me gusta soltar tanta mierda. Por eso me la guardo y hasta me deleito en ella. Desafortunadamente éste no es el caso, quizá porque mientras me bañaba, mis poros se abrieron y dejaron salir toda la perorata (jaja qué chida palabra, perorata) materializada en entrada bloguera. Los blogs son tan pasados de moda, pero corresponden a una especie de catarsis de nuestra era. Así que ahí les va:

Chihuahuitas que maman el De Efe, váyanse, el De Efe los espera.

Muchos justifican su hastío hacia nuestro estado por aquello de "es un rancho donde todos se conocen", "siempre son los mismos bares", "está muy aburrido". Bueno, todas esas afirmaciones son medianamente ciertas. la primera es, desde mi punto de vista, la más cierta de todas. Esto puede ser una bendición o una maldición. Para mí, pues es algo chido. Siempre que conozco a alguien sé que se establecerá alguna conexión con alguien que ya conozco, y siento que la relación, por lo tanto, será más interesante.

Para explicar mi punto, hago la semejanza con las nuevas ideas que conectamos a conocimientos previos en nuestras redes neuronales. Existe una explicación científica que justifica el aprendizaje significativo, aquel que se relaciona con algo que nosotros ya conocemos antes, promoviendo una efectiva neuroplasticidad: la cosmovisión. Dicho en palabras más comprensibles y menos pseudopedagógico-neurológicas, si nosotros vamos a aprender algo nuevo, es importante que lo relacionemos con algo que ya conocemos, de esta forma, neuronas que ya tengan almacenado un aprendizaje semejante, comienzan a mandar información y se hacen "amigas", promoviendo un aprendizaje más fuerte y que, a la larga, será más difícil que lo olvidemos. A esto se le puede llamar comprensión o asimilación.

Pues bien, lo mismo ocurre con las relaciones en Chihuahua. Cuando nosotros conocemos a alguien nuevo, y que a su vez conoce a otra persona relacionada con nosotros, se crea un vínculo más estrecho con esa persona. Lo negativo es cuando esa persona que conocemos nos tira malavibra, y pues habla pestes de nosotros... De cualquier forma, si nos vemos obligados a dicha convivencia, posiblemente cambie la percepción que tengan de nosotros y sea una relación más interesante.

La gente que se va al De Efe, dudo que se vayan así nomás, a la incertidumbre, sin tener gente que conozcan allá. Para los que lo hagan de esa forma: mis respetos. Son unos verdaderos aventureros...

Luego están las afirmaciones de "siempre son los mismos bares" y "está muy aburrido"... Bueno, es que la capacidad de diversión de una persona no se encuentra en la cantidad de centros nocturnos que existan en un lugar, sino a la propia capacidad de variar o disfrutar con su propia vida.

De algo estoy segura, no importa si se van al De Efe, a la sierra más remota o a Japón: quien tiene una visión mediocre de la vida, se aburrirá en cualquier lugar. Así que dejen de buscar pretextos para llamar aburrido a este lugar, lo más pesado de soportar debe ser su propia existencia.

Pobre De Efe. Se me figura una vaca temblando para sacarse de encima tanto animal.

1 comentario:

Chamán dijo...

BARBARA!!! BRAVO!! BRAVOO!! estoy ovacionando de pie!! Maravilloso escrito, maravilloso! te sentí como si estuvieses en un podio o algo.
Te felicito, realmente inspirás y enseñas y tu redacción esta simplemente perfecta. Arriba!